MEDIACIÓN EN MENORES EN ANDALUCÍA
LA JUNTA REALIZA 2.000 MEDIACIONES CON MENORES INFRACTORES PARA FACILITAR SU REINSERCIÓN SIN LLEGAR A JUICIO
La Junta de Andalucía ha llevado a cabo en 2017 un total de 1.986 mediaciones con menores infractores a través del programa que gestiona la Consejería de Justicia e Interior para impulsar dicho mecanismo de resolución extrajudicial de conflictos como método de reinserción.
La Junta de Andalucía ha llevado a cabo en 2017 un total de 1.986 mediaciones con menores infractores a través del programa que gestiona la Consejería de Justicia e Interior para impulsar dicho mecanismo de resolución extrajudicial de conflictos como método de reinserción.
El 63 por ciento de las mediaciones realizadas durante se resolvió de forma positiva en la comunidad y se evitó que el caso tuviese que ser resuelto en un juicio. Por el contrario, el 13 por ciento de las mediaciones emprendidas resultaron inviables, mientras que el 24 por ciento restante se encontraban aún en tramitación al finalizar 2017, según ha informado la Junta en un comunicado.
El balance de la Consejería refleja que de las mediaciones resueltas, el 48 por ciento se saldó con una reparación del daño causado por el menor infractor, el 30 por ciento con un acto de conciliación y una reparación incluida, y el 22 por ciento únicamente con una conciliación.
La comunidad autónoma andaluza cuenta con ocho equipos de mediación, cuyos profesionales tratan de que el infractor se responsabilice de las consecuencias de su delito o falta, comprenda el mal que haya causado, pida perdón a la víctima y repare el daño causado con las medidas que en cada caso se establezcan para ello.
De las mediaciones realizadas el pasado año, el 70 por ciento se llevó a cabo con chicos y el 30 por ciento con chicas. En cuanto a los tramos de edad, la mayoría de los usuarios de este sistema de resolución extrajudicial fueron infractores de entre 16 y 17 años, que representan el 55 por ciento, seguidos de los 14 y 15 años, con el 41 por ciento.
En este sentido, la Consejería considera que estos resultados demuestran la “eficacia y eficiencia” de la mediación, que tiene una finalidad educativa y socializadora basada en la prevención general y que conlleva múltiples beneficios, como el “ahorro de costes y de tiempo en la resolución de conflictos con menores involucrados”.
Además, en la resolución extrajudicial de conflictos destaca la importancia de la participación de las partes en litigio, que refuerza el valor de la solución alcanzada, al haber sido acordada y compartida. La función del mediador no es resolver el conflicto, sino conducir el proceso técnicamente para llevar a cabo la negociación.
Los profesionales informan, observan y preparan también a las partes para el encuentro, introduciendo elementos de reflexión que posibiliten el acercamiento y el acuerdo.
LA VANGUARDIA